CONSUMISMO
VERSUS NECESIDAD
Necesito, necesito y necesito, cada vez es más frecuente esta
palabra en el día a día de una persona. ¿Pero realmente se necesita todo lo que
se compra? Esta es una pregunta que escasamente pasa por la mente de la
sociedad actual, ya que millones de productos son consumidos diariamente. Cosas
que antes no existe y hoy en día son de suma necesidad o se creé que lo son.
Cada día es mayor el número de personas en el planeta, por ende será mayor el
consumo y como consecuencia se incrementará el agotamiento de las materias
primas para la fabricación de esos productos. Entendiendo que los recursos
naturales son los protagonistas en los procesos de fabricación, ya sea de
primera necesidad o no, debe venir a la cabeza del consumidor la siguiente
pregunta ¿realmente necesito consumir este producto? Yendo un poco más allá,
debería de surgir otra pregunta ¿cuánto le está costando al planeta la
producción de esto? Otra justa y consiente interrogante sería ¿cómo se tratará
el desechó que se generará de este producto? Es propio reconocer que esté grado
de conciencia no es del dominio de toda la humanidad, por contrarió es de solo
una minoría, la cual se ha dedicado a crear una serie de movimientos como lo es
el “consumo responsable” lo que viene siendo un estilo de vida; dónde no solo
se piense en las supuestas necesidades, sino la evaluación de que la necesidad
exista en primera instancia y de ser así verificar las opciones que ofrece el
mercado, en base a una fabricación ecología; donde se optimice el consumo de
materia prima y la disposición final sea ecológicamente garantiza.
Una de las causas principales del consumismo desenfrenado que
vive la humanidad, son la publicidad y mercado esa herramienta que es tan
poderosa y que no tiene el uso adecuado para el bienestar del planeta, ya que
en la mayoría de los casos se utiliza para vender y beneficiar a los dueños de
grandes industrias; en lugar de promover con la misma fuerza campañas de
reciclaje, ahorros de recursos naturales, métodos de fabricación ecológico,
entré otros.
Definitivamente, la aplicación de medidas y políticas
ecológicas son parte fundamental de la solución, por ejemplo: por cada dos
propagandas comerciales los medios de comunicación conjuntamente con las
industrias comerciales involucradas deberán transmitir una publicidad referente
a la educación ambiental, con la finalidad de ir creando una nueva visión de
uso y consumo de los recuerdos naturales. Los gobiernos y las instituciones
religiosas deben ser participantes activos y protagónicos de movimientos cómo
el consumo responsable.
Deben crearse medidas legales para la fabricación ecológica
dé los productos a nivel mundial. Por último, y no menos importante, que las
propuestas anteriores es tener la conciencia de consumir lo que realmente se
necesita y no lo que la publicidad me hizo creer que necesito, se trata de
tener hábitos que favorezcan no solo las necesidades del consumidor sino
también las del ambiente.
AUTOR: Ing. Lourdarelys Astudillo.
C.I 17.264.951
Una de las relaciones que, en gran medida, ha determinado el deterioro de las estructuras ecológicas por la presión de las actividades económicas directas al consumismo, radica en la asignación de valor de los recursos naturales que las sociedades hacen a través de la economía para su desarrollo, las cuales fluctúan de acuerdo al comportamiento del sistema económico-ecológico en permanente cambio. La economía asigna valor a los recursos naturales de acuerdo a preferencias de los individuos, los toma para la formación de riquezas y posteriormente excreta energía disipada (no útil) y desechos contaminantes.
ResponderEliminarIng. Katherine Godoy
ResponderEliminarEl mundo atraviesa una crisis global, que se expresa en la economía y en el ambiente, y se materializa en el cambio climático, la pérdida acelerada de la biodiversidad y la escasez de recursos naturales. Este impacto global es el resultado de una sociedad poseída por un modelo de consumismo descontrolado y de producción insostenible, donde el hombre, los recursos naturales e incluso el clima se convierten en mercancía.
Resulta imprescindible un proceso de transformación, en el cual la utilización de los recursos, la orientación de las inversiones, la canalización del desarrollo tecnológico y los cambios institucionales sean factores que contribuyan al mejoramiento del potencial económico para atender las necesidades humanas presentes y futuras en estrecha concordancia con el ambiente.