REPERCUSIONES
AMBIENTALES SOBRE LAS POLÍTICAS DE DESARROLLO
VERTEDERO
MUNICIPAL COMO RIESGO SOCIAL Y AMBIENTAL
A
medida que avanza el desarrollo, la frontera urbana crece y los servicios públicos se hacen ineficientes, y
prueba de ello es la mala disposición final de los desechos sólidos, por lo
cual se convierte en un riesgo social y ambiental que afecta la salud y la
calidad de vida en la población.
Las operaciones en vertederos implican
enterrar los desechos fuera de las zonas habitadas por el ser humano. Y esto
sigue siendo una práctica común en la mayoría de los países. A menudo se
establecen en lugares abandonados o no utilizados. Adecuadamente diseñados y
bien administrados que pueden ser un sistema relativamente barato e
higiénico de eliminar materiales de desecho.
Pero los vertederos viejos, mal diseñados
o mal gestionados pueden crear una serie de efectos ambientales adversos,
como el viento, la basura, la atracción de parásitos, y la generación de
líquidos lixiviados. Otro subproducto de los vertederos es el gas (en su
mayoría compuesto de metano y dióxido de carbono), que se produce como residuo
orgánico. Este gas puede crear problemas de olor, mata a la vegetación de la
superficie y es un gas de efecto invernadero.
Tal es el caso, del vertedero o centro de
acopio de los municipios san José de Guanipa Simón Rodríguez y parte de Freite
(San Tome); se ubica en la zona sur de Anzoátegui vía hacia la Aventazón y área
operativa de Bare, Municipio Simón Rodríguez del estado Anzoátegui; donde Inicialmente
fue administrado por Pdvsa y las alcaldías del municipio Simón Rodríguez y
Guanipa, luego desde 2005 hasta 2009 fue administrado por una empresa privada,
Tecniclean, para retornar posteriormente a manos de las alcaldías.
Cabe destacar que 23 toneladas de
basura son lanzadas diariamente en el vertedero, según estimaciones de la
supervisión de dicho centro; pero muchas veces se encuentra restringido debido
al colapso en sus áreas internas por retardo en el mantenimiento; lo que
provoca que los camiones viertan los desechos a lo largo de la vía,
percibiéndose como zona roja por su alto grado de afectación e insalubridad que
impacta al hombre y al ambiente.
Dicho problema se sigue
agudizando sin que el Gobierno Municipal se encargue de solucionar, pareciera
que las autoridades no quieren reconocer la gravedad del problema. El servicio
se encuentra en un total colapso, donde los desperdicios son lanzados a cielo
abierto, generando durante todo el día una larga disputa entre las personas que
residen en ese lugar; donde los cúmulos de basura y la proliferación de
insectos predomina en la periferia del vertedero, limitando el paso de
vehículos y afectando a las comunidades aledañas, dicha
situación empeora cuando llueve, porque los olores son prácticamente
insoportables.
Es necesario evaluar “si este vertedero
puede ser rehabilitado para transformarlo en un relleno sanitario y, en caso
contrario buscar los mecanismo de manera conjunta para brindar soluciones a la
colectividad”; con esta medida se determinará si puede pasarse de categoría
vertedero a relleno sanitario.
Este es un trabajo que no sólo es
responsabilidad de los Gobiernos, sino también, es un problema de todos, que
amerita ser solucionado.
Autor:
Yary Villalobos; C.I 11068936
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