Estilos de Desarrollo

Lograr un estilo de desarrollo propio no es tarea sencilla, ya que en ello intervienen una innumerable cantidad de variables como: la política, la educación, el ambiente, los factores sociales, los factores étnicos, entre otros, alinear u orientar todas estas variables hacia un mismo objetivo, es realmente complejo.

Sólo la discusión y el análisis de la interacción de estas variables, y manteniendo como eje transversal el ambiente se podrá visualizar un verdadero estilo propio de desarrollo.

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Crísis Ambiental Nacional y Mundial (ensayo 2)


Crisis Ambiental Nacional y Mundial

La crisis del medio ambiente no es tanto consecuencia del agotamiento de los recursos o de la reducción de la capacidad biológica del ecosistema global, sino producto de la crisis del modelo de desarrollo industrial. Las causas directas de esta crisis global las podemos hallar en una multiplicidad de factores interrelacionados, como población, ciencia y tecnología, crecimiento económico incontrolado y sus raíces hay que buscarlas en la misma concepción errónea de la relación naturaleza-hombre-sociedad (1).

Estos problemas no surgen de un malfuncionamiento de los sistemas ecológicos sino que son resultado de la errónea intervención antrópica sobre los mismos, del modelo económico industrial, de la mitificación del consumo, de la creencia en la capacidad ilimitada de crecimiento del actual sistema y, en última instancia, de un modelo social desigual que genera una "estratificación" de las consecuencias de los problemas ambientales.

Las desigualdades sociales, por un lado, permiten a unos pocos explotar en su beneficio los recursos ambientales y alejar tanto temporal como espacialmente las consecuencias dañinas de sus acciones no sostenibles; por otro lado, estas mismas desigualdades ocasionan que los grupos más desfavorecidos soporten de forma más inmediata y en sus entornos más próximos las consecuencias negativas de este modelo de desarrollo no sostenible y que dada su debilidad estructural les sea muy difícil iniciar cambios en el modelo socioeconómico que distribuyan equitativamente y, en última instancia, eliminen las externalidades ambientales.

En cuanto al impacto ambiental de los ecosistemas venezolanos puedo decir que aunque las ciudades dan ilusión de autosuficiencia, eficiencia e independencia de los procesos naturales, éstas no son autosuficientes. Para sostener su población y sus actividades económicas un área urbana requiere aire, agua energía, alimentos y otros recursos, y produce desechos. Conforme las áreas urbanas crecen, sus necesidades de entrada de recursos y salidas de contaminación, producen crecientes de fuentes distantes de otros ecosistemas. Las ciudades desempeñan un papel central en el proceso de desarrollo económico y social. En general, son lugares productivos que proporcionan un aporte al desarrollo económico de sus regiones. Sin embargo, el proceso de crecimiento urbano acarrea, a menudo, un deterioro de las condiciones ambientales circundantes, lo cual afecta a la población. Como lugar de residencia y actividades económicas, las ciudades concentran uso de energía y recursos, generando desperdicios, al punto que los ecosistemas tanto naturales como artificiales se sobrecargan y las capacidades para manejarlos se ven abrumadas. Los daños o costos ambientales ponen en peligro la productividad de las ciudades, la salud y la calidad de vida, en general, generándose, en consecuencia, un impacto socio-ambiental. Las ciudades tienden a convertirse en zonas rojas ambientales que requieren, urgentemente, de atención especial en las evaluaciones ambientales y de planificación y administración ambiental, a escala local, regional y nacional. Un ejemplo de esto se puede decir que es la falta de drenajes en la ciudad de El Tigre, y lo puedo confirmar con el aguacero del día sábado que se inundó toda la ciudad y se encontraban carros apagados en las diferentes calles y avenidas; esto es por la falta de planificación al momento de construir los conjuntos residenciales, edificios, avenidas, etc.  

(1)    Autor bajado de internet: (JIMENEZ HERRERO, 1989: 15).
 
 Autor: Janett Loreto; V-17264281
 

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